Comer es uno de los más grandes placeres de los que podemos disfrutar, y qué mejor que poder aprovechar de alimentos que conserven todas sus propiedades. Para aquellas personas que no tenemos tiempo de hacer la compra todos los días, pero que, aun así, no queremos renunciar a comer bien, la solución es una envasadora al vacío.

Los selladores al vacío no suelen estar en todas las cocinas, pero en los últimos años han ganado más adeptos. Ya que cada vez se da más importancia a la calidad y frescura de la comida.

Y esta es una herramienta que ayuda a preservar la frescura, textura, sabor, color y vitaminas de los alimentos de forma natural, ¡y sin necesidad de utilizar aditivos ni conservantes!

El hecho de disponer de un sellador al vacío, ya no doméstica, sino comercial en cualquier establecimiento gastronómico, contribuye a la economía y aporta muchos beneficios.

Esta técnica prolonga el buen estado de los alimentos frescos y congelados. Además, permite reducir costos en las compras y tener a mano de todo, sin necesidad de salir corriendo a comprarlo.

Para algunos responsables de restaurantes, comprar un sellador al vacío no es una decisión fácil. Entre otras cosas, porque sospechan de su utilidad y dudan sobre si compensará la inversión.

En este artículo te diremos cuáles son los mejores criterios para adquirir un sellador al vacío.

1. El uso que se le dará: ya sea hogareño o industrial, dependerá fundamentalmente del tamaño del negocio o del número de integrantes de la familia. Si el volumen de productos a envasar será grande y se usará a diario, entonces se debe pensar en una envasadora potente y con múltiples prestaciones.
2. La facilidad de manejo: Una máquina muy complicada no resultará eficiente. La tarea de envasado insumirá demasiado tiempo y esfuerzo y en lugar de ser una ayuda, se volverá un obstáculo.
3. La elección de las bolsas que se ajustan a la máquina: Hay bolsas de distintos tamaños, individuales y en rollos. De acuerdo a las necesidades, se puede tener una idea de cuál es el sistema más conveniente.
4. El tamaño de la máquina: En este aspecto, habrá que tener en cuenta el espacio disponible y las dimensiones del lugar exacto en el que se colocará.